Cómo diseñar para la minoría beneficia a la mayoría

En diseño, la auténtica inclusión transciende el mito de la «norma». Cuando nos limitamos a atender a la «norma», nos perdemos la riqueza de la diversidad. En cambio, si diseñamos espacios que tengan en cuenta la neurodiversidad y las distintas capacidades físicas, creamos un entorno que beneficia a todos, mejorando la comodidad, la productividad y el bienestar.

Reconocer la neurodiversidad y las capacidades físicas en el diseño

Entender las diversas formas en que las personas perciben e interactúan con su entorno nos permite aprovechar un enorme potencial sin explotar. La neurodiversidad abarca un amplio espectro de capacidades cognitivas y estilos de aprendizaje que afectan a entre el 15 y el 20 % de la población. Junto con las distintas capacidades físicas de las personas, incluidas aquellas con discapacidades o deficiencias visuales o auditivas, nos damos cuenta de que la experiencia humana es un rico tapiz de capacidades diversas.

Y cuando incluimos estas necesidades diversas en nuestro planteamiento del diseño, allanamos el camino para obtener unos espacios realmente inclusivos que mejoren las experiencias de todos.

De la teoría del diseño a las losetas de moqueta

El poder del diseño reside en su potencial para apoyar y mejorar las vidas de las personas en todo el espectro de la neurodiversidad y las capacidades físicas. Para ello, hay que prestar mucha atención a aspectos como la estimulación, la naturalidad, la flexibilidad y la adaptabilidad. En este sentido, las losetas de moqueta constituyen una herramienta versátil. Con colores, patrones y texturas personalizables, pueden crear ambientes que estimulen o calmen, en función de las necesidades. Sus cualidades de absorción del sonido pueden reducir la sobrecarga sensorial para aquellas personas sensibles al sonido, mientras que sus propiedades táctiles pueden resultar beneficiosas para las personas con deficiencias visuales.

Losetas de moqueta: los héroes anónimos del diseño inclusivo

En el diseño inclusivo, las losetas de moqueta ofrecen unas claras ventajas, ya que permiten una personalización que satisface diversas necesidades sensoriales. Por ejemplo, las diferentes texturas bajo los pies pueden ayudarlas a orientarse. Por otro lado, sus cualidades de absorción del sonido hacen que los espacios sean más cómodos, y permiten definir diferentes áreas y facilitar la orientación. Con unos diseños inspirados en la naturaleza, también pueden crean un entorno relajante.

Crear espacios inclusivos con las propiedades de la moqueta

El camino hacia la inclusión en el diseño empieza por una cuidadosa selección de las propiedades de la moqueta. Colores que evocan la calma o estimulan la concentración, diseños que se ajustan a las necesidades del usuario y texturas que proporcionan orientación táctil y comodidad: todos estos elementos contribuyen a un diseño inclusivo. ¿Preparado para descubrir el potencial transformador de las losetas de moqueta en su diseño?

Conclusión: apueste por un diseño que tenga en cuenta la neurodiversidad y la accesibilidad

Diseñar para la neurodiversidad y las distintas capacidades físicas significa aceptar y celebrar la diversidad de nuestra experiencia humana. Significa reconocer las formas únicas en que cada persona percibe e interactúa con su entorno.

A pesar de que el diseño de interiores convencional normalmente no consigue satisfacer estas necesidades, tenemos la solución a nuestro alcance. Los suelos desempeñan un papel crucial a la hora de crear espacios que integren esta diversidad. Elegir bien las propiedades de la moqueta podrá mejorar su diseño y fomentar un entorno cómodo e inclusivo. Le recomendamos que se plantee si sus espacios fueron diseñados teniendo en cuenta todas estas necesidades diversas.

¿Está preparado para crear un diseño que realmente se adapte a todos? Alcance el siguiente paso hacia un diseño verdaderamente inclusivo con ayuda de las losetas de moqueta.